JUDAS PRIEST + MEGADETH + TESTAMENT
Jueves 19 de Marzo de 2009 - Pavelló Olímpic de Badalona
Podría hacer un copiar/pegar de los artículos de mis compañeros que han seguido el Priest Fest en otras ciudades, y hubieran encajado perfectamente con lo sucedido en Barcelona, donde al igual que en Donosti, Madrid y Zaragoza, la fiesta fue máxima.
El cartel era más que atractivo. JUDAS PRIEST, ya de por sí motivo suficiente para olvidar la crisis y levantarse del sofá, más la mitad del Clash Of The Titans, MEGADETH y TESTAMENT, que junto a SLAYER y SUICIDAL TENDENCIES arrasaron el país a principios de los noventa.
Han pasado veinte años desde entonces, pero este par de leyendas del thrash siguen con las guitarras en alto y repartiendo tralla y calidad en partes iguales.
TESTAMENT
Abrieron la caja de los truenos. Con puntualidad británica, los de Chuck Billy daban por inaugurado el PRIEST FEST en la Ciudad Condal con "Over The Wall". Ante la mitad de la audiencia (la otra mitad estaba repartida entre bares de los aledaños y los atascos de llegada a Badalona), Testament ofrecieron un concierto intenso, enérgico y ensalzado por un buen sonido que nos acompañó toda la velada.
Recalcar la labor de la sección rítmica, con el gran Paul Bostaph tras los parches preciso y contundente, y el inquieto Greg Christian completando la base. Precisamente de sus cuatro cuerdas nacieron las primeras notas de "Souls Of Black", que tras una brutal "The New Order", representó en solitario a su homónimo álbum. Chuck está en muy buena forma, y su voz se adaptó tanto al thrash old-school como al principio baladero de "Sins Of Oblivion".
En él disfrutamos de un gran solo de Alex Skolnick, quien los fue clavando uno tras uno imprimiéndoles su propio estilo, arropado por el siempre más sobrio pero igualmente efectivo Eric Peterson.
"More Than Needs The Eye" estuvo amenizada por los coros del público, mientras que "D.N.R" fue conducida magistralmente por el ritmo eléctrico, rápido y cavalgante de Bostaph. Los solos de Skolnick y Peterson se cruzaron durante el medio tiempo de "3 Days Of Darkness", y un grito casi deathmetalero final precedió a "Practice What You Preach". Para acabar "Formation Of Damnation" nos recordaba lo que el telón de fondo predicaba desde el principio, TESTAMENT tiene "nuevo" álbum (entrecomillado pues hace una año de su lanzamiento). Y que publiquen muchos más.
Setlist
Over the wall
The new order
Souls of Black
Sins of omission
More than meets the eye
D.N.R.
3 days in darkness
Practice what you preach
The formation of damnation
MEGADETH
Chuck y compañía abandonaron el escenario dejándonos con ganas de más. Pero un clavo saca a otro, y MEGADETH se encargaron de satisfacer nuestras ansias de thrash. Cuando salió Dave Mustaine al escenario me invadió una sensación de Deja-vu de la que no me desprendí hasta que acabó el set, y es que por suerte para nosotros son bastantes las veces que les hemos visto últimamente por nuestros escenarios. Y en todas hemos presenciado prácticamente lo mismo: concierto técnicamente perfecto, sobrio, directo y sin pausa.
MEGADETH repetía la formación de su última visita, y al igual que entonces quedé maravillado con la técnica individual de cada músico y con el conjunto compacto que forman. Mustaine estuvo en su línea, parco en palabras pero detallista en sus agradecimientos al público. A la guitarra volvió a estar perfectamente acompañado por un Chris Broderick comedido en actitud y acertado en lo musical. James Lomenzo sigue aportando su pose más rockera tras su bajo, completando la base rítmica junto a un inconmensurable Shawn Drover.
El set favoreció el espectáculo, pues al no tener álbum que presentar oficialmente, se centró en los grandes clásicos. Únicamente "Sleepwalker", con la que se inició la descarga, recordó la etapa post-Cryptic Writings.
Tras él, "Wake Up Dead" y "Take No Prisoners" acabaron de poner las cartas sobre la mesa. "A Tout Le Monde" fue muy coreada tanto proactivamente como respondiendo a la llamada del sing-along, por un público que ya llenaba la pista del Pavelló Olímpic y gran parte de las gradas. "Skin O’ My Teeth" mostró lo mejor de Broderick en los solos, al igual que en "She Wolf", donde los dobló con Mustaine. Lomenzo hizo un buen trabajo a los coros, en un tema en el que su final melódico instrumental se fusionó con "In My Darkest Hour". El famoso riff de "Symphony Of Destruction" fue acompañado por los coros ya habituales de "MEGADETH, MEGADETH".
En "Sweating Bullets" destacó el trabajo a las baquetas de Shawn Drover, un tema que Dave Mustaine interpretó en gran parte un tono más bajo que el original. "Hangar 18" volvió a ofrecer el impresionante duelo de solos Broderick/Mustaine, y "Peace Sells... But Who’s Buying" marcó la retirada del grupo, para volver y ofrecer un último "Holy Wars" tras los gritos de "Mustaine, Mustaine" y los saludos del ídem al público.
Fueron despedidos con una merecida gran ovación, muy agradecida por un Dave Mustaine que se despidió con el habitual "You’ve been great, We’ve been Megadeth".
Setlist
Sleepwalker
Wake Up Dead
Take No Prisoners
A Tout Le Monde
Skin O My Teeth
She Wolf
In My Darkest Hour
Symphony of Destruction
Sweating Bullets
Hangar 18
Peace Sells...But Who's Buying
Holy Wars
JUDAS PRIEST
La cosa iba muy bien, 2/3 del festival había ido sobre ruedas. Ahora quedaba la parte que más dudas me presentaba, a tenor de las últimas visitas agridulces de Judas Priest a Barcelona. En la última, en Abril de 2005, ya habíamos presenciado una gran mejoría respecto a la gira inicial de reunificación, tanto a nivel de complicidad entre músicos como en sus labores vocales e instrumentales. Pero aún y así faltó la explosión definitiva de todo su potencial, como sí ha sucedido en este PRIEST FEST.
Aparte de un mejor sonido, el concierto fue mucho más directo, más improvisado, y el grupo más sólido y alegre. La reunión por primera vez no pareció en ningún momento incómoda ni forzada. Pero sobretodo me sorprendió Rob Halford, quien hizo uso pero no abuso de la reverberación, y cantó a un gran nivel la mayoría del concierto. Por supuesto tuvo sus momentos de cansancio vocal, especialmente a medio set, pero el resultado final fue impresionante.
La dupla Tipton/Downing derrochó talento, sobre la base del imprescindible Ian Hill (quien volvió a marcar una cruz en el suelo, y de ahí no se movió) y el demoledor Scott Travis.
El grupo saltó al escenario de pasarelas rojinegras tras la intro de "Dawn Of Creation" para interpretar "Prophecy", en la que Halford apareció con el Judas-Tridente vestido de monje plateado. El mejor tema de "Nostradamus" precedió a los celebrados "Metal Gods", "Eat Me Alive" y "Between The Hammer And The Anvil", donde Halford forzó agudos imposibles.
Volvimos atrás en el tiempo unos 25 años para escuchar "Devil’s Child", donde la caja de Travis sonó cual arma de fuego. "Breaking The Law" no rompió solo la ley, rompió con todo. Halford se machacó las cuerdas vocales para ofrecer la mejor versión del clásico de clásicos, resintiéndose en la siguiente "Hell Patrol" donde usó registros más graves que en su versión original y en la que disfrutamos de un solo doblado Tipton/Downing de regusto NWOBHM.
"Death" sirvió de descanso tanto a grupo como a público, y especialmente a Halford, quien apareció sentado en un trono del que no se levantó hasta el final del oscuro y lento tema. Travis aprovechó el espaciado tempo entre baquetazos para hacer virguerías con sus herramientas de trabajo.
"Dissident Agressor" y la sentida balada "Angel" precedieron a otro de los esperados hits de la noche. Como telón de fondo, un inmenso ojo presentaba "Electric Eye" (tras su grabada compañera inseparable "Hellion"), en la que Rob Halford apareció de la nada en una de las tarimas laterales. Fue él mismo quien agradeciera el apoyo de los fans durante toda su dilatada historia, e invitó a todos a continuar la fiesta con (¡No me Judas!) el himno "Rock Hard, Ride Free", una de las favoritas de un servidor cuyo estribillo cantamos desde la pista y gradas en solitario. En ella empezó las labores solistas K.K. Downing, al que se le unió Tipton para doblarlo. También tomó la iniciativa en "Sinner", donde Halford volvió a ofrecer lo mejor de su voz.
Tres asomos de redoble de "Painkiller" hicieron subir la temperatura del Olímpic de Badalona, para romper el termómetro tras el arranque definitivo a manos de un Scott Travis brutal a lo largo de toda la canción. Acabó con todo el grupo sobre la tarima despidiéndose del entregado público.
No tardaron en oírse los motores de la moto sobre la que Halford reapareció sobre el escenario para entonar "Hell Bent For Leather". Tras él, las luces verdes ambientaron "The Green Manalishi", despedida por un agudo marca de la casa del front-man, quien apareció con una chaqueta blanca plateada solo frente al público para jugar al pregunta/respuesta cantado. Judas aún tenía otra cosa en camino: "You’ve Got Another Thing Comin’" despidió un set del que echamos de menos, a pesar de haber pasado ya la medianoche, el "Living After Midnight".
Grandioso concierto, y el primero al que he asistido que ha hecho honor a la grandeza de Judas Priest. ¡The Priest Is Back!
Setlist
Dawn of Creation
Prophecy
Metal Gods
Eat Me Alive
Between The Hammer And The Anvil
Devil's Child
Breaking The Law
Hell Patrol
Death
Dissident Agressor
Angel
The Hellion/Electric Eye
Rock Hard, Ride Free
Sinner
Painkiller
Hell Bent For Leather
The Green Manalishi (With The Two-Pronged Crown)
You've Got Another Thing Comin`
Texto y fotos: Hèctor Prat
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