Jimmy Hendrix.
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"Lo siento, amigos, aquí no os podemos servir. Son normas de la casa, ya sabéis". Estas palabras salieron de los labios de un camarero de aspecto malhumorado de un pub de Liverpool el 7 de Abril de 1967.Tras lanzar la advertencia, se giró y fue a atender a otro cliente. El vistazo inicial había sido tan rápido que los dos hombres que habían entrado en el bar no tenían la más mínima idea del por qué no se les permitía tomar una copa. La situación era extraña porque se trataba del típico pub inglés que servía a todo el mundo. Uno de los hombres a los que se negó servir ese camarero era Noel Redding, de veintiún años, bajista de la "Jimi Hendrix Experience"....
.....tanto Noel como su compañero, Jimi Hendrix, llevaban fulares morados en el cuello, y lucían unas enormes aureolas translúcidas de pelo rizadísimo. Noel vestía unos relucientes pantalones de campana de color violeta, mientras que los ajustados pantalones de Jimi eran de terciopelo rojo. Además Jimi llevaba una camisa pirata con chorreras ahuecadas en el pecho, y encima de la chaqueta, una capa negra. Los únicos que vestían así eran los actores teatrales del siglo XVIII, o las estrellas del rock....
...para esquivar a esas fans acérrimas, la mayoría de las cuales encontraban a Jimi sexualmente irresistible, Noel y Jimi habían elegido aquel pub aislado para una copa rápida antes del siguiente pase....
... estaban en Liverpool, cuyos residentes, por supuesto, eran seguidores de sus paisanos los Beatles, pero que a un astro en alza no se le sirviera una copa era inconcebible en cualquier lugar de Inglaterra. "Era el típico pub inglés, describía Noel, lleno de estibadores, tenderos y gente así". Lo primero que pensó Jimi, según lo que le comentó más tarde a Noel, era que le discriminaban por el color de la piel. Como afroamericano que había vivido en las zonas del sur de Estados Unidos, Jimi ya sabía lo que era que le negaran una copa por motivos racistas. Una vez en Nashville, Tennessee, habían disparado contra las ventanas de su casa por el simple hecho de ser negro. Jimi había pasado tres años insoportables actuando en el llamado "Circuito Chitlin": un itinerario de garitos, fábricas de hielo y bares, donde se tocaba rhythm and blues, casi siempre ante un público afroamericano. Sólo para llegar a los lugares de actuación, los músicos negros debían planificar cuidadosamente por anticipado necesidades tales como obtener comida y usar un retrete, simples servicios que en ciertas zonas de la Norteamérica blanca se negaban a los negros....
...lo segundo que le vino a la cabeza a Jimi aquel día en el pub de Liverpool, fue preguntarse que quizá era su chaqueta. Lucía una antigua chaqueta militar, reliquia de los días de esplendor del imperio británico...
...había comprado el capote en un rastro londinense y era de estilo muy recargado: sesenta y tres botones dorados para abrocharlo, en las mangas y en el centro destacaban unos complicados bordados dorados y se remataba con un cuello que cualquiera que lo hubiera lucido habría pasado casi por un dandi....
...tal vez a Jimi le pasó por la cabeza informar al viejo de su floreciente fama, pero se le acababa la paciencia. Aunque se le tenía por silencioso y bien educado, Jimi también podía tener muy mal genio, y estallaba de vez en cuando, especialmente bajo los efectos del alcohol, y entonces la situación era de sálvese quien pueda. En aquel pub aún no había tomado ni una copa, lo que disminuía las posibilidades de que Jimi acabara lanzando al suelo a aquel viejo. Al final, con un leve tartamudeo, una tendencia superada de la infancia en la que recaía con los nervios, Jimi se enfrentó al camarero: "¿Es... es porque soy negro?", dijo airadamente. El tabernero proporcionó una respuesta rápida y concluyente: "¡No, por el amor de Dios! ¿Es que no habéis leído el letrero de la puerta?". Y sin más, el viejo recogió su trapo y se fue exasperado al otro extremo del bar. Una vez descartada la posibilidad del prejuicio racial, a Jimi y a Noel les embargó un aire de humor y alivio....
...se miraron el uno al otro sonriendo como chiquillos que hubieran hecho algo malo a la espera de ser descubiertos. "Nos pusimos a reír, recordaba Noel. No teníamos ni idea de lo que habíamos hecho". Noel bromeó con Jimi diciendo que a lo mejor en Liverpool tenías que sermiembro de "Los Treegulls", el apodo que Noel daba a los Beatles, paraque te sirvieran una copa. Noel salió a la calle para ver qué había enla puerta, y vio dos carteles clavados con chinchetas. Arriba había un gran cartel de un circo que estaba al final de la calle y debajo había un letrero manuscrito que explicaba el motivo por el cual se los excluía del pub. Cuando Noel vio el segundo cartel le dio tal ataque derisa que acabó cayéndose al suelo. Era una de esas anécdotas para recordarla años y años, pensó Noel. Una de ésas con la que bromearían durante meses en el autocar del grupo....